martes, enero 15, 2008

Jugarse la vida


Me juego la vida al tratar al alumno que no soporto
me juego la vida en las horas de soledad muda
me la juego en la oración sin eco,
cuando me muerdo la lengua para no herir
o cuando necesito la paciencia que no tengo.

Me juego la vida en la fidelidad más seca
me la juego al darme cuando sé que no puedo esperar nada.
También cuando amar es arriesgado, y amo
cuando tengo sueños que no son míos
y cuando no puedo evitar escandalizar.

Y me la juego porque no sé vivir de otra manera
porque voy aprendiendo que sólo arriesgando
en los momento más oscuros, cuando no hay donde agarrarse
puedo acoger lo que se me regala.

2 comentarios:

Luis Garcia dijo...

¿Y por que no? ¿Por que no arriesgar esa unica vida que tenemos? La vida es un regalo, pues vamos a disfrutarla y a arriesgarla para ganarla de verdad.

Anónimo dijo...

Es arriesgado intentar buscar un amigo de verdad, pero merece la pena poruqe "el auténtico amigo es el que sabe todo sobre tí y sigue siendo tu amigo" (Cobain) y el que confía en tí a pesar de haberle fallado.
Me juego la vida en la oración, pero es un salto con red, porque El siempre me espera, confía en mí, me perdona, me ama...como el auténtico amigo.