lunes, mayo 12, 2008

No tengo tiempo

No tengo tiempo. Quizás sea esta de las frases más pronunciadas hoy día. Y más en esta época de fin de curso en que hay tanto que hacer. El tiempo es de las cosas que más me hacen pensar. Y no es el primer post en el que reflexiono sobre él. Aunque ahora es más bien sobre la falta de tiempo. A veces oigo eso de ójala mis días tuvieran 40 horas. Tampoco soluciona nada porque las llenaríamos.
Pero me resisto a decir que no tengo tiempo. Pues soy consciente de que cada día se me regalan 1440 minutos, en los que tengo un gran margen de libertad para utilizarlos.
Entonces me tengo que decir que es cuestión de prioridades. Qué cosas son realmente importantes, a quiénes debo entregar este tiempo que recibo, con quien pasar estos minutos que se me regalan. Y después de esto tengo asumir deportivamente que hay cosas que no caben, cosas para las que no tengo tiempo y seguro que nunca lo tendré: como jugar al golf, hacer un curso de photoshop, irme de crucero... y muchas más. Y no pasa nada.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mira lo importante que son las peloras de golf aunque nunca juegues a ese deporte jajaja. Seguro que lo conoces. Circula por la red:
"Un profesor, delante de sus alumnos de la clase de filosofía, sin decir ni una palabra, cogió un bote grande de vidrio y procedió a llenarlo con pelotas de golf. Después preguntó a los estudiantes si el bote estaba lleno. Los estudiantes estuvieron de acuerdo en decir que sí. El profesor cogió una caja llena de perdigones y los vació dentro del bote. Estos llenaron los espacios vacíos que quedaban entre las pelotas de golf. El profesor volvió a preguntar de nuevo a los estudiantes si el bote estaba lleno, y ellos volvieron a contestar que sí. Después el profesor cogió una caja con arena y la vació dentro del bote. Por supuesto que la arena llenó todos los espacios vacíos y el profesor volvió a preguntar de nuevo si el bote estaba lleno. En esta ocasión los estudiantes le respondieron con un sí unánime. El profesor, rápidamente añadió dos cervezas al contenido del bote y efectivamente, el líquido llenó todos los espacios vacíos entre la arena. Los estudiantes reían.
Cuando la risa se fue apagando, el profesor les dijo: 'Quiero que os fijéis que este bote representa la vida. Las pelotas de golf son las cosas importantes como la familia, los hijos, la salud, los amigos, el amor, cosas que te apasionan. Son cosas que, aunque perdiéramos el resto y nada mas nos quedasen estas, vuestras vidas aún estarían llenas. Los perdigones son las otras cosas que nos importan, como el trabajo, la casa, el coche.....La arena es el resto de las pequeñas cosas. Si primero pusiéramos la arena en el bote, no habría espacio para los perdigones, ni para las pelotas de golf.
Lo mismo sucede con la vida. Si utilizáramos todo el nuestro tiempo y energía en las cosas pequeñas, no tendríamos nunca lugar para las cosas realmente importantes.
Presta atención a las cosas que son cruciales para tu felicidad.
Juega con tus hijos, concédete tiempo para ir al médico, ve con tu pareja a cenar, practica tu deporte o tu afición favorita. Siempre habrá tiempo para limpiar la casa, para reparar la llave del agua.
Ocúpate primero de las pelotas de golf, de las cosas que realmente te importan. Establece tus prioridades, el resto solo es arena'.
Uno de los estudiantes levanto la mano y le preguntó que representaban las cervezas.
El profesor sonrío y le dijo: 'Me encanta que me hagas esta pregunta! La cerveza es para demostrar que aunque tu vida te parezca llena, siempre hay un lugar para dos cañas con un amigo'"

Anónimo dijo...

Hola Javi, en esas mismas reflexiones ando en este fin de curso... Cuestión de prioridades, habrá que estar muy atenta para que no se cuele ningún crucero ni cursillo de golf... Un abrazo enorme desde Charrilandia
volvoreta

Profeballa dijo...

unpremio para ti!

http://notasespirituales.blogspot.com/2008/05/premio-al-esfuerzo-personal.html